Llegamos al ecuador de la Semana Santa con un mal sabor de boca, ya que tras vivir un Domingo de Ramos y un Lunes Santo espléndidos, la lluvia nos chafó el Martes Santo. Y la predicción de los próximos días no parece que vaya a mejor. Se espera una leve mejoría en la jornada de hoy Miércoles Santo, pero a partir del Jueves Santo de momento hay un índice de probabilidad de precipitación del 100%, que se mantiene hasta el final de la semana. Una muy triste y amarga noticia, y que, de todo corazón, yo espero, como creo que todos los que están leyendo estas líneas en este momento, que cambien a mejor, porque es mucho lo que nos queda por vivir.
Tras un Domingo de Ramos espléndido, nos llegó un Lunes Santo que se presentaba muy inestable, pero al final la cosa se solucionó y la hermandad de Santa Cruz le ganó la partida a la lluvia, logrando hacer Estación de Penitencia a la Parroquia Mayor y Más Antigua de Sta. Mª Magdalena.
No ha tenido la misma suerte la hermandad de Pasión, a la cual la lluvia a privado de su Estación de Penitencia. Decisión acertada de la Junta de Gobierno la de no salir, porque en estas situaciones hay que pensar con la cabeza y no con el corazón, y pensar que es mucho a lo que se arriesga uno y la de cosas que se llevan a la espalda; Titulares, patrimonio, nazarenos, niños... Es una decisión difícil de tomar, puesto que hay mucho esfuerzo detrás de ese día que llevamos todo un año esperando, pero es lo mejor. Desde luego, la hermandad ha hecho bien en no realizar este año su Estación de Penitencia. Para el año que viene será y esperemos que este panorama no se repita en lo que queda de Semana Santa.